Vía Verde: Puente Viesgo - Ontaneda
1. Puente Viesgo
Puente Viesgo es uno de los municipios que más ha impulsado el desarrollo de la Vía Verde del Pas. El antiguo alcalde Rafael Lombilla, además de impulsar la construcción de la Vía del Pas, se encargó de restaurar la que ahora es la más bonita estación de tren de la vía. Antiguo centro neurálgico de la comarca, hoy podemos disfrutar sentados en su andén viendo pasar a los ciclistas y paseantes.
En Puente Viesgo no debes dejar de comer en sus restaurantes, admirar su bonito ayuntamiento, la antigua Iglesia o hacer la breve pero bellísima senda de los pescadores que discurre junto al río Pas. ¡Antes o después de alquilar nuestras bicis podrás pasar un día estupendo en esta localidad! |
2. El antiguo lavadero
En este momento, en el que todos tenemos agua corriente en casa, y lavadoras para hacer la colada, podemos minusvalorar el significado que este tipo de construcciones tenían para un pueblo. Antiguamente, serían de lugar para la limpieza, para el abastecimiento de agua y además eran un importante lugar de reunión, especialmente para las mujeres, principales encargadas de estas tareas.
Parcialmente renovado, todos podemos hacernos una idea de cómo era este antiguo lavadero, al lado del río. |
3. Las pontonetas
4. La Cantera
En mitad del recorrido se encuentra esta cantera que le da un aspecto distinto a la fisionomía del lugar. Seguro que durante tu paseo verás más de una casa unifamiliar en la que vivirías sin dudar. ¿Por qué no construir la tuya propia? En esta cantera encontrarás todo el material que necesitas...¡soñar es tan barato! |
5. Maqueta de la penilla
Encontraréis un cartel de madera en la propia Vía Verde del Pas cuando atraveséis la penilla que indicará “Maqueta del pueblo de Penilla”. Estad atentos, debéis desviaros hacia la derecha si vais en dirección Ontaneda. Está ubicada a poco más de 20 metros del recorrido. José Cruz Casar, vecino de Penilla, ha combinado una afición con el sueño de hacer una maqueta de su pueblo proyectando y ejecutando en su totalidad la creación de la misma. Gracias a ello, el resto de los mortales tenemos la suerte de poder disfrutar de una fidedigna maqueta en cualquier momento del año.
Está ubicada en una bonita caseta acristalada junto a la parada de autobús y os recomiendo que la veáis como curiosidad, tanto si vas con niños como si no. Hay una pequeña zona verde junto a ella dónde dejar las bicis. |
“El chaval de la Garma” (Julián) escribe un divertido poema sobre el pueblo. Lo encontraréis escrito y colgado en uno de los laterales por los que se puede observar la maqueta del pueblo de Penilla. Empieza así:
Aunque no soy de Penilla a este pueblo yo le quiero
Porque aquí hay gente estupenda
Por ejemplo, el tabernero…
Si queréis leer el resto ya sabéis, sólo tenéis que parar a echar un vistazo ;-)
6. Museo del pobre
Este pequeño museo totalmente gratuito guarda joyas en su interior que nunca podrías imaginar como una reproducción de "la Fragua de Vulcano" realizada por Pedro Díaz Obregón, un ex-copista del Museo del Prado de Madrid. Te invitamos a entrar, dedicarle un rato y tratar a Pedro con el respeto que se merece. Tiene mucho que aportar, toda una vida de vivencias y sobre todo un arte peculiar en sus pinceles. La eterna pregunta de "¿Qué es la vida?" flota en todas sus obras personales. En unas se nota angustia y en otras un ojo crítico a la sociedad pero todas tienen en común el color que impregna su obra. Gracias Pedro por compartir con la sociedad y sin ánimo de lucro el arte que estás creando a lo largo de tu vida. ¡Necesitamos más personas cómo tu!
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7. Convento San Francisco de el Soto de Iruz
Aunque pasaremos a su lado, tendremos que desviarnos unos metros para llegar a su plaza, que ya es un placer con sus pintorescas casas cántabras y su empedrado.
La iglesia puede ser visitada, no así el convento que a día de hoy no está abierto al público. Podemos asomarnos por una gran mirilla para ver su patio interior e imaginarnos la tranquilidad que se puede respirar en su interior. Encontraremos también en esa plaza el museo pobre y también un monumento al músico cántabro más célebre de todos los tiempos: Juan Carlos Calderón. Tiene en su haber hasta 5 Grammys... ¡Nunca te acostarás sin saber una cosa más! |
8. Acueducto
A mitad de camino entre Puente Viesgo y Ontaneda, en plena Vía Verde del Pas, nos cruzamos con el acueducto de piedra de Toranzo que se encuentra perfectamente conservado.
Junto a él se ha creado una zona recreativa con varios bancos de madera dónde poder disfrutar de un Picnic. También cuenta con una fuente de agua y aparcamiento de bicis. El sitio es ideal para almorzar, comer, merendar o simplemente hacer una pausa en el camino y estirar las piernas. Aparca tu bici, echa un buen trago de agua fresca y continúa tu camino.
Por el acueducto de la Vía Verde construido en 1885, que antes se conocía como Puente Rual, pasaba la gran mayoría del agua que surtía a la ciudad de Santander. Hoy en día está en desuso, pero ha quedado para la posteridad una infraestructura de piedra singular que da un aire único al entorno por el que transcurre.
Junto a él se ha creado una zona recreativa con varios bancos de madera dónde poder disfrutar de un Picnic. También cuenta con una fuente de agua y aparcamiento de bicis. El sitio es ideal para almorzar, comer, merendar o simplemente hacer una pausa en el camino y estirar las piernas. Aparca tu bici, echa un buen trago de agua fresca y continúa tu camino.
Por el acueducto de la Vía Verde construido en 1885, que antes se conocía como Puente Rual, pasaba la gran mayoría del agua que surtía a la ciudad de Santander. Hoy en día está en desuso, pero ha quedado para la posteridad una infraestructura de piedra singular que da un aire único al entorno por el que transcurre.
9. Puente Ferroviario

Este puente es la mayor infraestructura creada para el recorrido de la antigua ruta. Pasa por encima del río Pas y está compuesto por un entramado de metálico que le da una gran robustez. A día de hoy el puente tiene como superficie tan sólo tablones de madera. Pasar andando o en bici es toda una aventura ya que da la sensación de que en cualquier momento te puedes caer por un agujero! (no es broma, andaos con ojo).
Lo más sorprendente es que sigan usándolo los vecinos de la zona para acceder en coche a sus viviendas. ¡Hay que tener valor!
Lo más sorprendente es que sigan usándolo los vecinos de la zona para acceder en coche a sus viviendas. ¡Hay que tener valor!
10. Parque de Alceda

Un gran pulmón verde, rodeado de árboles y perfecto para pasar un día en familia, pareja o con amigos. Cuenta con pequeños accesos al río, para poder mojarnos los pies tras una dura jornada de bici, y bancos para comer. ¡Tiene incluso una tirolina!
Es el final de la ruta, lugar ideal para hacer ese picnic-recompensa o tumbarte en el verde a descansar.